Me detuve en las plantas de mis pies

Pensando un poco en las memorias de mi cuerpo, me detuve en las plantas de mis pies. Y al ver su textura, empecé a recorrer con cada marca lo pisado.
Y pasan en mi mente a modo de fotografías los pisos, los pasos dados y el suelo bailado.

Recuerdo los pastos fríos que humedecieron mis talones

Recuerdo los pastos secos con ramas duras que hicieron hoyuelos en mis pies
También recuerdo el asfalto cálido que alguna vez dancé

Pienso en las piedrecillas de horas de camino, que golpearon mis pies, pero eran mi única salida; pienso en el agua que alguna vez nadé

Pienso en las tablas que me sintieron saltar, caminar, caer y levantar; que me sintieron recorrer las mismas direcciones una y otra vez

Sonrío y recuerdo la cerámica fría que sintió miles de veces las puntas de mis pies, y me dejaron callos y destrezas para hoy crecer.

Pero sobre todo, recuerdo mis zapatos cómplices, decenas de pares de baletas rotas, remendadas y finalmente reemplazadas; tenis deportivos, cotizas, zapatos de baile moderno y zapatillas para baile latino; todos cómplices de mis sueños, de mis nervios, de mis afanes, de mis alegrías; todos cómplices de dolores y cansancio, cómplices y copartícipes de mis escenarios, de mí público, de los aplausos.

Pensando hoy en las memorias de mi cuerpo, me detuve un poco en las plantas de mis pies.

Por, Petirrojo